La palabra «igniv», del rético, se traduce como «nido». Expresa el deseo de la empresa de que sus clientes se sientan como en casa en sus restaurantes, como el pájaro en su nido. Además de la excelente hospitalidad y el ambiente acogedor que la interiorista española Patricia Urquiola ha creado especialmente para IGNIV, la empresa, en sus cuatro excepcionales restaurantes, propone a los comensales compartir la comida. Los clientes no tienen que ceñirse a una secuencia tradicional de platos; en su lugar, se les ofrece la experiencia de compartir alta cocina degustando hasta 30 viandas servidas sobre la mesa en numerosos cuencos. Todos los restaurantes IGNIV, es decir, el Grand Resort de Bad Ragaz, el Badrutt's Palace de St. Moritz, el Marktgasse Hotel de Zúrich, el St. Regis de Bangkok, y el Andermatt, siguen la misma filosofía culinaria.